Ahora que los políticos tienen tiempo, podrían aprovechar para cambiar la legislación referente a las mociones de censura al gobierno.
Hora es de que la democraticen, de modo que cuando un gobierno sea sometido a una moción de censura y la pierda, ese mismo gobierno quede obligado a disolver las cámaras antes de siete días y a convocar elecciones en el plazo de dos meses para que sea el pueblo quien elija al nuevo gobierno, y no, como hasta ahora, los cinco Corleones de esa Sicilia mesetaria que es el congreso.
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