DESNUDA BAJO LA CAMISA... (NI JUNIO EN PARÍS - fragmento 2)

«Él vestía un fino pantalón veraniego. Estaba descalzo y con el tórax desnudo. Fumaba de pie mirando distraído la calle. El humo del cigarro le añadía gris a una atmósfera cenicienta. Me acerqué a él. La camisa transparente apenas me cubría las bragas. Miré su pecho, moreno y poderoso. Me proponía llamar su atención para que reparara en mi desnudez bajo la camisa. La lluvia me pone triste y me siento sola le confesé. Expelió una bocanada de humo y sin volverse dijo todos estamos solos. Pero a mí nadie me quiere, añadí para sondear sus sentimientos. Tu madre te quiere. ¡Le habría descerrajado un tiro! ¿Qué me importaba mi madre? Lo esencial era lo que ÉL sentía por mí. Ella me quiere por obligación, le dije. Nadie tiene obligación de querer, puntualizó. Hubo un silencio. Yo insistí pero aparte de ella nadie me quiere. No respondió. Hubo otro silencio. Lo mío es muy dramático ¿sabes?, continué con acento lloroso. Lo tuyo son tonterías de adolescente, me cortó. Le pegué una bofetada y retrocedí temerosa. Ni siquiera se giró. Tras unos segundos corrí a disculparme. Tampoco se movió. Sentada en el suelo me abracé a sus piernas sollozando. Él fumaba ausente. La lluvia retiñía en la baranda del balcón…»


NI JUNIO EN PARÍS / Ediciones AKAL

(www.akal.com/libros/Ni-Junio-en-ParIs/9788446031314)

[Foto ilustración: David Hamilton
]